jueves, 12 de diciembre de 2024
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El ecosistema de emprendimiento en Colombia enfrenta diversos retos, como la disponibilidad limitada de capital de riesgo y redes de apoyo fragmentadas, que generan enormes barreras para el desarrollo de iniciativas empresariales. Estas barreras afectan especialmente a las startups y a las iniciativas emergentes, y deben ser superadas para dinamizar el desarrollo económico y promover condiciones de igualdad en la sociedad.
El crowdfunding, conocido como un mecanismo colaborativo para la financiación de iniciativas o proyectos, se basa en la emisión de valores a través de una infraestructura electrónica (Fintech), creando un puente entre numerosos inversionistas y recaudadores que solicitan financiación. Esta estrategia de financiación colaborativa ha ganado popularidad como un método alternativo de financiamiento en todo el mundo, incluyendo Colombia. En 2023, las cifras oficiales reportan que se movilizaron recursos por encima de los 15,000 millones de pesos en diversos negocios; sin embargo, su implementación exitosa enfrenta varios desafíos
Es de destacar que en Colombia dicha actividad se encuentra reglamentada, entre otros, por los Decretos 1357 de 2018; 1235 de 2020 y 2105 de 2023, que propenden por regular las entidades que participan en el mercado y que deben ser autorizadas por la Superintendencia Financiera para acceder a financiación colaborativa.
Tras considerar los gaps en cuanto a necesidades de financiación de las compañías y la curva de aprendizaje alcanzada al respecto- gracias a la actividad de la Unidad de Proyección Normativa y Estudios de Regulación Financiera-; el último Decreto amplió el tope de financiación hasta los 58.000 salarios mínimos legales vigentes, lo que representa unos 75.400 millones de pesos. Mientras que se consideró la ampliación en el monto de inversión para inversionistas no calificados hasta los 19.000 salarios mínimos legales vigentes (24.700 millones de pesos).
No obstante, uno de los mayores desafíos en Colombia es el entorno regulatorio, toda vez que la normativa aún presenta ambigüedades y restricciones que pueden desalentar tanto a los emprendedores como a los inversionistas, entre ellas, las exigencias de capital mínimo para las plataformas y las limitaciones en la cantidad de recursos que pueden ser gestionados por proyecto, pueden ser percibidas como barreras significativas.
Aun cuando el acceso a internet ha mejorado considerablemente en Colombia, persisten desigualdades significativas en la conectividad; especialmente en zonas rurales y regiones apartadas. En ese sentido, se debe reconocer que su desarrollo, depende en gran medida de la tecnología digital para conectar a emprendedores con posibles financiadores, lo que significa que las limitaciones en el acceso a internet y la alfabetización digital pueden excluir a una parte importante de la población de los beneficios de este modelo de financiamiento.
Por último, es clave fortalecer la confianza entre actores para potenciar el sistema de financiamiento colectivo, por lo que las plataformas de crowdfunding deben esforzarse por establecer mecanismos robustos de seguridad y transparencia, para ganarse la confianza de los usuarios. De tal suerte que la verificación de proyectos y la rendición de cuentas claras son esenciales para construir una reputación positiva y fomentar una mayor participación
Dicha estrategia tiene el potencial de revolucionar el financiamiento en Colombia, pero superar los desafíos es crucial para crear un ecosistema próspero que beneficie tanto a emprendedores como a inversores. Desde el programa de Finanzas y Negocios Internacionales de la Universidad San Buenaventura Cali, se viene generando iniciativas para fomentar y consolidar en la comunidad académica, el aprovechamiento de esquemas de financiación novedosos y que beneficien iniciativas disruptivas en el mercado.
Jose Fabian Ríos Obando
Docente tiempo completo Programa Finanzas y Negocios Internacionales
Universidad San Buenaventura Cali